Casas que tienen cerebro
Sistema automático apaga y enciende luces, aire acondicionado, riego o alarma en rutinas que prefiera el dueño; en Uruguay hay unos 100 hogares del futuro.
Con el botón "fiesta" se prenden todas las luces de la casa y se apagan los regadores y la alarma. Al apretar "cine", la iluminación de la sala de video se hace más tenue y si la hubiere, calla la música funcional. Con "viaje", se cierran todas las persianas y se activa la alarma, aunque por las noches el sistema realiza una "simulación de presencia": se prenden y apagan algunas luces, la televisión o el equipo de audio para que los ladrones crean que hay alguien. La "casa inteligente" o automatizada ya no pertenece al universo de la ciencia ficción, es realidad y también en Uruguay, donde por lo menos cien residencias de Carrasco y Punta del Este cuenta con alguna automatización, según dijo Norberto Zejerman, de la empresa Domotec, una de las compañías uruguayas que se dedica al rubro.
Con el objetivo de ahorrar energía y ganar seguridad y confort, la variedad de dispositivos residenciales ha crecido en los últimos años. "Existen dispositivos para automatizar casi todo, depende de las necesidades o gustos de cada uno", dijo Zejerman.
Algunas casas de Carrasco, por ejemplo, tienen un "perro electrónico", o sea, un dispositivo que se acciona con el movimiento exterior, al estilo de sensor de luces, pero que en lugar de encender un foco, ladra como si fuera un feroz rottweiler. Acto seguido, la alarma se activa y parte de la iluminación interior de la casa se enciende, para simular que el dueño del supuesto perro se ha despertado.
Otras herramientas pueden racionar automáticamente la comida de las mascotas o gestionar la música funcional de la casa para cada una de las habitaciones. Inclusive existe un sistema de reciclaje automático del cubículo de arena que hace de baño para gatos.
A esta rama de la tecnología se la conoce como "domótica"; es decir, la posibilidad de controlar casi todo lo que use energía eléctrica o tenga un motor. Incluye manejar las luces de la casa, prenderlas o reducir su intensidad, subir persianas, correr cortinas, controlar la calefacción o refrigeración de los ambientes, el ventilador de techo, o activar el filtro de la piscina… todo ello en los tiempos y rutinas que establezca el dueño de casa. Según explicó Zejerman, todo se maneja desde un sistema central cuyos comandos se accionan en una pantalla sensible al tacto, aunque también hay controles parciales o totales en cada una de las habitaciones e incluso controles remotos.
Asimismo, el sistema puede accionarse por teléfono. Por ejemplo, en el camino a casa uno puede llamar y dar instrucciones sobre la temperatura, luces o nivel de alarma para cuando llegue.
ESCENAS. Para la rutina, el hogar puede ser programado de una forma. Por ejemplo, establecer que la persiana del cuarto de los niños se levante a la hora en que van a la escuela o que la alarma se accione a determinada hora de la noche y se apague al amanecer. El sistema sabe la hora y el día, por lo que cambiará todas o algunas de las funciones cuando sea fin de semana o feriado.
En ocasiones especiales, además, existen las "escenas". Para el usuario, estos son botones que activan sectores, o la casa entera, para eventos excepcionales. "Fiesta", "cine" o "viaje" son algunos de ellos. Pero puede haber cuantos se quiera. Zejerman tiene el sistema instalado en su casa y una de las escenas es "nenas en casa". La acciona cuando sus hijas se quedan solas y con ese movimiento se activa la alarma en todo el perímetro, enciende las luces exteriores y el sistema llama por teléfono a los padres si algo llegara a pasar.
Automatizar la vivienda cuesta entre 4.000 y 7.000 dólares de base, dependiendo del tamaño de la casa y de lo que se pretenda automatizar. No es, por lo tanto, para cualquiera, si no para aquellas construcciones donde puede transformarse en algo rentable; en la gestión y ahorro de energía. Una de las aplicaciones es involucrar sensores de presencia que hacen que las luces de los pasillos o habitaciones se vayan prendiendo a medida que alguien los recorra. También es posible que los regadores del jardín se activen según el clima: si llovió, no riegan y si hace mucho calor, riegan más.
Lo ideal y más barato es diseñar una casa desde el principio pensando en automatizarla, porque eso permite instalar funciones (puertas, ventanas y persianas motorizadas) que de otra manera sería muy complicado controlar, usando un cableado propio y exclusivo.
www.domotica.com.uy. Empresa de domótica para residencias, oficinas y edificios.
www.expocasadomotica.com. Página web de la feria que se realizará en Buenos Aires del 4 al 6 de junio. Está el listado de participantes y los "inventos" que se preparan.
www.domotica.net. Comunidad interesada en la domótica, se publican artículos y hay foros de discusión.
¿Qué podrá ser controlado? Depende de cada familia; todo se puede configurar, evitando en la mayoría de los casos tener que romper paredes para poner caños. Por ejemplo, hay motores tubulares para las cajas de las persianas, o cables de interconexión planos que se asemejan a un zócalo.
"La vivienda no cambia de forma: agrega funciones", como dijo Andy Radogowski, de la empresa argentina de domótica X-tend.
En Uruguay, Norberto Zejerman, de la empresa Domotec, aseguró que están haciendo jornadas de capacitación para ingenieros y arquitectos de modo que tengan en cuenta la automatización desde las primeras fases de construcción.
"Esos sistemas no influyen en el diseño de la casa; algunos son inalámbricos o con cableado oculto como el de la electricidad", dijo Zejerman. Domótica proviene de la unión de las palabras domus que en latín significa "casa" y la terminación de "informática".
En los grandes edificios, la domótica es casi una necesidad y de hecho, muchas de estas construcciones en Uruguay cuentan con algún nivel de automatización. Hay que imaginarse un edificio de más de 20 pisos, por ejemplo. A la noche, se debe contar con una persona que vaya piso a piso apagando las luces o encendiendo las alarmas. Con la domótica, en cambio, el sistema puede tomar esas mismas acciones con apretar un botón. También se ofrece esta tecnología para oficinas, empresas o fábricas que buscan automatizar parte del proceso.
Sistema automático apaga y enciende luces, aire acondicionado, riego o alarma en rutinas que prefiera el dueño; en Uruguay hay unos 100 hogares del futuro.
por El País Digital/Uruguay/MB/Domingo 29.04.2007, 03:42 hs. | Montevideo, Uruguay
Con el botón "fiesta" se prenden todas las luces de la casa y se apagan los regadores y la alarma. Al apretar "cine", la iluminación de la sala de video se hace más tenue y si la hubiere, calla la música funcional. Con "viaje", se cierran todas las persianas y se activa la alarma, aunque por las noches el sistema realiza una "simulación de presencia": se prenden y apagan algunas luces, la televisión o el equipo de audio para que los ladrones crean que hay alguien. La "casa inteligente" o automatizada ya no pertenece al universo de la ciencia ficción, es realidad y también en Uruguay, donde por lo menos cien residencias de Carrasco y Punta del Este cuenta con alguna automatización, según dijo Norberto Zejerman, de la empresa Domotec, una de las compañías uruguayas que se dedica al rubro.
Con el objetivo de ahorrar energía y ganar seguridad y confort, la variedad de dispositivos residenciales ha crecido en los últimos años. "Existen dispositivos para automatizar casi todo, depende de las necesidades o gustos de cada uno", dijo Zejerman.
Algunas casas de Carrasco, por ejemplo, tienen un "perro electrónico", o sea, un dispositivo que se acciona con el movimiento exterior, al estilo de sensor de luces, pero que en lugar de encender un foco, ladra como si fuera un feroz rottweiler. Acto seguido, la alarma se activa y parte de la iluminación interior de la casa se enciende, para simular que el dueño del supuesto perro se ha despertado.
Otras herramientas pueden racionar automáticamente la comida de las mascotas o gestionar la música funcional de la casa para cada una de las habitaciones. Inclusive existe un sistema de reciclaje automático del cubículo de arena que hace de baño para gatos.
A esta rama de la tecnología se la conoce como "domótica"; es decir, la posibilidad de controlar casi todo lo que use energía eléctrica o tenga un motor. Incluye manejar las luces de la casa, prenderlas o reducir su intensidad, subir persianas, correr cortinas, controlar la calefacción o refrigeración de los ambientes, el ventilador de techo, o activar el filtro de la piscina… todo ello en los tiempos y rutinas que establezca el dueño de casa. Según explicó Zejerman, todo se maneja desde un sistema central cuyos comandos se accionan en una pantalla sensible al tacto, aunque también hay controles parciales o totales en cada una de las habitaciones e incluso controles remotos.
Asimismo, el sistema puede accionarse por teléfono. Por ejemplo, en el camino a casa uno puede llamar y dar instrucciones sobre la temperatura, luces o nivel de alarma para cuando llegue.
ESCENAS. Para la rutina, el hogar puede ser programado de una forma. Por ejemplo, establecer que la persiana del cuarto de los niños se levante a la hora en que van a la escuela o que la alarma se accione a determinada hora de la noche y se apague al amanecer. El sistema sabe la hora y el día, por lo que cambiará todas o algunas de las funciones cuando sea fin de semana o feriado.
En ocasiones especiales, además, existen las "escenas". Para el usuario, estos son botones que activan sectores, o la casa entera, para eventos excepcionales. "Fiesta", "cine" o "viaje" son algunos de ellos. Pero puede haber cuantos se quiera. Zejerman tiene el sistema instalado en su casa y una de las escenas es "nenas en casa". La acciona cuando sus hijas se quedan solas y con ese movimiento se activa la alarma en todo el perímetro, enciende las luces exteriores y el sistema llama por teléfono a los padres si algo llegara a pasar.
Automatizar la vivienda cuesta entre 4.000 y 7.000 dólares de base, dependiendo del tamaño de la casa y de lo que se pretenda automatizar. No es, por lo tanto, para cualquiera, si no para aquellas construcciones donde puede transformarse en algo rentable; en la gestión y ahorro de energía. Una de las aplicaciones es involucrar sensores de presencia que hacen que las luces de los pasillos o habitaciones se vayan prendiendo a medida que alguien los recorra. También es posible que los regadores del jardín se activen según el clima: si llovió, no riegan y si hace mucho calor, riegan más.
Lo ideal y más barato es diseñar una casa desde el principio pensando en automatizarla, porque eso permite instalar funciones (puertas, ventanas y persianas motorizadas) que de otra manera sería muy complicado controlar, usando un cableado propio y exclusivo.
Para casas ya construidas, hay que analizar qué puede automatizarse y qué no. La utilidad y rentabilidad del sistema lo da la superficie construida de la casa, principalmente. De 200 metros cuadrados en adelante la opción de la domótica puede tenerse en cuenta. En el mundo, la domótica está creciendo a pasos agigantados. Acaba de terminar un encuentro de productores en España y desde el 4 al 6 de junio se realizará en Buenos Aires la Expo Casa Domótica. Y es que el futuro de las residencias ya es presente.
Con información de La Nación/GDA)
Para navegar
www.domotec.com.uy. Empresa uruguaya que se dedica a la automatización de casas y edificios. www.domotica.com.uy. Empresa de domótica para residencias, oficinas y edificios.
www.expocasadomotica.com. Página web de la feria que se realizará en Buenos Aires del 4 al 6 de junio. Está el listado de participantes y los "inventos" que se preparan.
www.domotica.net. Comunidad interesada en la domótica, se publican artículos y hay foros de discusión.
Automática sin importar los diseños
La imagen de la casa del futuro que dejó parte de la ciencia ficción del siglo XX en nuestra mente colectiva incluye construcciones que combinan un diseño arquitectónico ultra moderno con perillas, botones y luces: es una automatización visible. En la actualidad se apela más a la sutileza: incluyen todo el confort que puede ofrecer la tecnología, pero sin resignar la estética. Es decir, se puede tener una casa inteligente con cualquier estilo. ¿Qué podrá ser controlado? Depende de cada familia; todo se puede configurar, evitando en la mayoría de los casos tener que romper paredes para poner caños. Por ejemplo, hay motores tubulares para las cajas de las persianas, o cables de interconexión planos que se asemejan a un zócalo.
"La vivienda no cambia de forma: agrega funciones", como dijo Andy Radogowski, de la empresa argentina de domótica X-tend.
En Uruguay, Norberto Zejerman, de la empresa Domotec, aseguró que están haciendo jornadas de capacitación para ingenieros y arquitectos de modo que tengan en cuenta la automatización desde las primeras fases de construcción.
"Esos sistemas no influyen en el diseño de la casa; algunos son inalámbricos o con cableado oculto como el de la electricidad", dijo Zejerman. Domótica proviene de la unión de las palabras domus que en latín significa "casa" y la terminación de "informática".
En los grandes edificios, la domótica es casi una necesidad y de hecho, muchas de estas construcciones en Uruguay cuentan con algún nivel de automatización. Hay que imaginarse un edificio de más de 20 pisos, por ejemplo. A la noche, se debe contar con una persona que vaya piso a piso apagando las luces o encendiendo las alarmas. Con la domótica, en cambio, el sistema puede tomar esas mismas acciones con apretar un botón. También se ofrece esta tecnología para oficinas, empresas o fábricas que buscan automatizar parte del proceso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario