Continué caminando hacía el Mirador de Colón a la Plaza de España a través de las Rablas con las tiendas en plena actividad comercial. Los ùnicos comercios que parecen en crisis son las farmacias. Vimos muchos farmacias cerrados. Aquì me choquè con una protesta contra el maltrato de los empleados por parte del Ìnditex. Los manifestantes andan protestando unos meses para los bajos sueldos y el alto rendimiento de empleados en Zara y no permiten a los turistas que entren a la tienda. Sigo pensando que Înditex es una empresa multinacional muy importante tanto para la imagen del comercio español, como para el dinero que se rinde en España gracias a los productos de ropa exportados en todo el mundo. Sin embargo, no hay que olvidar que el èxito de la empresa no se debe solamente al dinero ahorrado por falta de la publicaciòn sino a la obra de manos baratos. Y eso, por muy interesante que sea desde el punto de vista de un economista acadèmico en la Universidad de Harvard, se puede traducir en una realidad muy dura para los emleados actuales de Zara.
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